Tema sugerido por Natalio García (Coordinador TIC; Dpto. Informática)
Hablar de Leño es hablar de Rosendo, nuestro viejo rockero por excelencia.
La trayectoria de este trío madrileño no fue muy larga, desde 1978 hasta 1983. Sorprendentemente su disolución se produjo cuando más éxito estaban experimentando, coincidiendo con la gran gira veraniega de conciertos que ofrecieron junto a Miguel Ríos y Luz, que ya fue mencionada hace varias semanas en este mismo blog.
La carrera musical de Rosendo había comenzado varios años antes de la formación de Leño, ya que perteneció hasta 1977 a Ñu, la banda de José Carlos Molina, como miembro original de ésta.
Leño nos dejó un puñado de grandes temas como Que tire la toalla y Maneras de vivir. Una vez desaparecido el grupo, Rosendo inició de forma casi inmediata una excelente trayectoria en solitario llena de grandes éxitos como Agradecido, Loco por incordiar, Pan de higo y una magnífica versión rockera de No dudaría, el clásico del gran Antonio Flores.
Leño nos dejó un puñado de grandes temas como Que tire la toalla y Maneras de vivir. Una vez desaparecido el grupo, Rosendo inició de forma casi inmediata una excelente trayectoria en solitario llena de grandes éxitos como Agradecido, Loco por incordiar, Pan de higo y una magnífica versión rockera de No dudaría, el clásico del gran Antonio Flores.
Ha pasado mucho tiempo pero Rosendo sigue al pie del cañón y todo hace pensar que su actividad musical no finalizará hasta que... ya podéis imaginar cuándo, esperemos que dentro de muchos años.
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